Superproducción británica que nos traslada a uno de los conflictos más sangrientos de la historia: la Primera Guerra Mundial. Saul Dibb, director de “La Duquesa” y “Suite Francesa” vuelve a demostrar su hábil talento para el cine de época en esta adaptación de la novela de R. C. Sherriff y Vernon Bartlett.
Marzo de 1918. Primera Guerra Mundial. La compañía “C” llega para empezar su turno en las trincheras de primera línea del norte de Francia, dirigida por el cansado capitán Stanhope (Sam Claflin). Con una inminente ofensiva alemana acercándose, los oficiales (Paul Bettany, Stephen Graham, Tom Sturridge) y su cocinero (Toby Jones) manosean la comida y los recuerdos de sus vidas antes de la guerra para distraerse, mientras Stanhope empapa su miedo en whisky, incapaz de lidiar con el temor a lo inevitable. Un joven oficial, Raleigh (Asa Butterfield), llega recién salido del entrenamiento y se emociona con la emoción de su primera actuación real, sobre todo porque debe servir bajo Stanhope, su antiguo monitor de escuela y objeto del afecto de su hermana.